En el año 2016 la editorial Vaso Roto puso en marcha una colección de antologías poéticas en las que recogía las voces poéticas de diecisiete mujeres
pertenecientes a un mismo país y cuya obra literaria se ha desarrollado en su mayor parte en el siglo XXI. Sombras, incendios y desvanes: Diecisiete Poetas Rumanas (Vaso Roto, 2021) es la nueva antología en unirse a esta reveladora y necesaria colección. La escritora Catalina Iliescu, precedida por un prólogo de Simona Sora, una de las autoras rumanas más reconocidas en la actualidad, recoge los versos en edición bilingüe. Lo extraordinario de estas autoras es la singularidad que cada una de ellas, “un dolor único a pesar de haber presenciado similares parcelas de historia, similares violaciones, dejos de usurpaciones y vejaciones que sólo la poesía puede resaltar con altura”. Una muestra de la poesía por venir, son una unidad en cuanto al futuro. Esta antología muestra un ambiente realista, crudo, humano y, pese a todo, esperanzador, cuyo refugio común es el mismo: la poesía.

Podría decirse que lo que más le importa a la poeta Alice Popescu es el silencio. El silencio como postura de observación, de testigo. En su poesía recorre una larga etapa de reflejo: en los otros, pero también en sí misma, en la poesía de su generación, así como en el lenguaje.


Doina Ioanid ha publicado hasta la fecha seis volúmenes de versos, que consisten, sin excepción, en poemas en prosa de uno a veinticinco versos. Describe la poesía como “un amor tardío”.


Prosista de origen, Stefanie Mihalache escribe poesía sofisticada y alcara al mismo tiempo, al igual que su prosa. Sus poemas son narrativos, fragmentos de realidad de su propia vida, se solapan con la irrealidad y la inmortalidad.