Gertrude Stein escribió su particular “Principito” con protagonista femenina: El mundo es redondo.
Gertrude Stein (1874-1946) se instaló en París y convirtió su residencia en punto de encuentro de escritores (Guillaume Apollinaire y Jean Cocteau, entre otros) y artistas y pintores de vanguardia como Henri Matisse y Pablo Picasso. Reunió una importante colección de arte moderno y, en los años veinte, ejerció gran influencia sobre los escritores estadounidenses de paso por Europa, como Scott Fitzgerald o Ernest Hemingway. Como escritora, Gertrude Stein se diferenció por sus experimentos lingüísticos, calificados por unos críticos de profundos, y considerados por otros como ejemplos del «culto a lo ininteligible».
El mundo es redondo es mucho más que un libro infantil. El inimitable estilo de prosa de Stein encuentra el protagonista perfecto en la mente naïve de su protagonista Rosa, una niña que por sus repentinos impulsos y su siempre cambiante concepción del mundo, decide ascender la cumbre de una montaña para aislarse del mundo y descubrir quién es. De este libro escribó el New York Times Book Review “Miss Stein ha atrapado en esta estructura arquitectónica de palabras que riman y riman una y otra vez la esencia de ciertos estados de ánimo de infancia… los dibujos trasladan algo del propio sentimiento de Rose sobre la grandeza del espacio y la infinitud a pinturas de una gran belleza, son maravillosos”.
Editado en España por Tres Hermanas, este impresionante álbum ilustrado por Clement Hurd, replica a la perfección el original de 1939, incluidos los dibujos en color azul sobre papel rosa pétalo insistencia de Stein.
